Hombres: ¿cabello largo o corto?


Un estudio llevado a cabo en la Escuela de Negocios Wharton, de la Universidad de Pensilvania en Estados Unidos ha revelado que llevar el pelo muy corto o rapado hace que los hombres parezcan más masculinos y dominantes.

Se les atribuyen valores relacionados con el poder, la autoridad y la influencia. A su vez, una encuesta anterior indica que el 83% de las mujeres prefieren a los hombres con pelo… y casi la mitad de ese porcentaje les gusta el cabello "levemente largo" en su pareja.



Hombres con pelo largo

Es sabido que en algunos círculos sociales y profesionales, los hombres con el cabello largo no son bien vistos.

El origen del cabello largo en los hombres en las sociedades modernas, es símbolo de rebeldía, los principales precursores de esta moda fue el movimiento Hippy, en la década del 60 y principios de los 70, y obviamente que no termina esta moda, porque hasta la fecha sigue y se puede notar fundamentalmente en los artistas, músicos, con los grupos de rock etc.

El cabello largo en el hombre es visto como símbolo de juventud y de carácter más distendido y romántico, también a estas personas se les atribuye una forma de ser más despreocupada, y por lo tanto tienden a tener menos estrés.


El cabello corto y sus ventajas

A pesar de que se ven menos atractivos y más mayores, los hombres con poco pelo son percibidos como más varoniles y dominantes.

Sin embargo con raparse la cabeza basta para que además la imagen que proyectan les haga parecer más fuertes e incluso con un potencial de liderazgo superior que aquellos con un cabello más largo.

Para llegar a estas conclusiones la investigación se centró en analizar cómo la sociedad percibe a los hombres calvos y rapados.

Un total de 60 voluntarios participaron en el experimento que constaba de tres fases.

La primera se basaba en observar diferentes fotografías de hombres de la misma edad con ropa similar cuya única diferencia era tener mucho cabello, calvicie moderada o la cabeza totalmente rapada.

Las conclusiones revelaron que estos últimos encabezaron las listas por poder, autoridad e influencia.

En el segundo estudio se analizaron las fotografías retocadas de manera digital de cuatro individuos.

Cada una se mostró dos veces, la primera vez con cabello y la segunda sin él, y aquellos que tenían menos pelo fueron percibidos como más altos y fuertes.

Por último, los voluntarios recibieron la descripción escrita de varios hombres, sin fotografías, en la que se detallaban sus atributos físicos, incluyendo si tenían poco cabello o si estaban rapados.

De igual forma, se repitió el resultado de percepción de mayor masculinidad, liderazgo y fortaleza.


¿Que opina la ciencia?

Consultados un grupo de psicólogos de la misma universidad en dónde se realizó el estudio (Universidad de Pensilvania) sobre esta investigación, dijeron que el liderazgo se debiera ejercer desde la convicción de los argumentos y del ejemplo, no por el tamaño de la cabellera.

Concluyeron que, mas allá de las apariencias, jamás nos deberíamos dejar influenciar por un interlocutor en relación meramente a su aspecto físico.